En este solar del centro comercial se localizó un tramo de vía romana construida en época del emperador Augusto (siglo I a. C.). Hacia el norte, la vía se alejaba de la ciudad y llevaba al puente que cruzaba el río Francolí. En dirección al sur, conectaba con el sector de la necrópolis paleocristiana. Mide 4 m de ancho y está construida con una capa muy compacta de tierra y guijarros.
Otra de las construcciones documentadas es una domus suburbana, la residencia de una familia acomodada, organizada en torno a un patio central. Disponía de una sala de recepciones con un ábside para la celebración de actos sociales. En el lado este de la casa se encuentran los baños, con un vestuario y estancias a diferente temperatura. El caldarium, o sala caliente, estaba decorado con un vistoso mosaico que se puede ver durante la visita.