Una de las singularidades de la Farmacia Esteva es su colección de tarros. Estos tarros monocromos, vidriados en azul cobalto por fuera y esmaltados en blanco en su interior, probablemente proceden de Talavera de la Reina, del siglo XVI. Lo que destaca de la colección es su cantidad. Los tarros están rotulados en frío y el boticario dibujaba medallones al estilo Luis XVI.