Los más de 300 abanicos que se exponen en esta sala dan fe de la diversidad de formas, materiales y técnicas que puede tener este objeto, así como de la variedad temática de sus representaciones: mitológica, alegórica, decorativa, popular y conmemorativa. Ejemplo de esta última son el de la boda de Fernando VII con su última esposa, María Cristina de Nápoles, celebrada en 1829, y los de la primera Exposición Universal de Londres, en 1851, y la de París, en 1900.