El ánfora, que servía para llevar y guardar líquidos, presenta barniz negro-rojizo en todo el vaso, con la excepción de los recuadros, en los que se desarrolla el tema central: la despedida de una cuadriga. Un auriga, a la derecha, vestido con túnica larga y montado en el carro tirando de las riendas de los caballos, se dispone a partir; a la izquierda, un joven desnudo con lanza hace señas de despedirse. Un pájaro vuela entre el auriga y los caballos. Una cadena trenzada de palmetas dobles corona la escena. Hay tres ejemplares muy similares, atribuidos al mismo pintor, en el Metropolitan Museum de Nueva York.