Vaso cerámico de arcilla cocida, realizado a mano, del período del Neolítico final. Presenta decoración de cordones impresos vertical y paralelamente a la base. Tiene dos perforaciones que podían haber servido para colgarlo. Fue hallado en la Cueva del Segre, yacimiento excavado en 1917 por el director del museo en aquel momento, Mn. Joan Serra i Vilaró. Esta cueva había tenido distintos niveles de ocupación, como demuestran los restos arqueológicos encontrados (vasos de arcilla, punzones de hueso y restos líticos, entre otros).