Esta es la planta noble del edificio y la antigua residencia de la familia de Marian Vayreda. El espacio se ha dividido en tres ámbitos: religioso, profano y social. Aquí se muestra todo el abanico de producciones, más allá de la imaginería religiosa, que han realizado a lo largo de la historia los talleres de Santos de la ciudad.
La Segunda República y la Guerra Civil española fueron tiempos muy convulsos y los talleres tuvieron que adaptar su producción a la demanda y empezar a fabricar modelos totalmente profanos para abrirse así a nuevos campos comerciales: el pedagógico, el lúdico y el decorativo.
En esta planta, el visitante también podrá contemplar la sala de los vitrales, con la imponente chimenea custodiada por dos caballeros y el espacio dedicado a una actividad muy arraigada en Olot, el belenismo, y a una de sus figuras más destacadas: Ramón Amadeu.