En 1915, la editorial Seix i Barral sacó al mercado lo que sería el teatro de juguete más popular y con una importante vertiente educativa: el Teatro de los Niños. Este teatrino, modelo CC, obtuvo el premio de honor concedido por el Fomento de las Artes Decorativas en la III Exposición de Juguetes celebrada en Barcelona en 1917.
Seix i Barral publicó hasta 27 obras, como La fierecilla domada o La ciencia más que el poder, donde además del librito de la función se adjuntaban los personajes y los decorados pertinentes.