Se trata de una de las primeras cámara-proyector de cine que se comercializaron. Deriva de un prototipo fallido ideado por Georges Demeny en 1893.
Este modelo permite la proyección de películas de 35 mm no perforadas. En los años posteriores sufrió distintas actualizaciones técnicas, una de ellas para poder grabar y proyectar películas con bobinas de 100 m de largo.