En 1892 Émile Reynaud inició las representaciones estables del teatro óptico en el Musée Grévin de París bajo el nombre de Pantomimas Lumineuses, que duraron hasta el 1900, con un total de 12.800 representaciones ante más de medio millón de espectadores. El teatro óptico proyectaba sobre una pantalla un filme de dibujos animados de entre seis y quince minutos de duración. Es considerado el antecedente de las proyecciones de dibujos animados en las salas de cine. La técnica del teatro óptico se basa en la del praxinoscopio, también inventado por Reynaud.