La caza fue, para las economías de las masías y del núcleo urbano, un complemento para la dieta de sus habitantes. La caza del conejo, de la perdiz y de otros animales requería una serie de utensilios específicos. Las jaulas que servían para transportar los hurones hasta las madrigueras para así obligar a salir a las víctimas como los conejos; carbureros y palas de cortar para cazar de noche pájaros pequeños; reclamos o reproducciones de animales para atraer a las presas al punto de caza, etc., eran algunos de los elementos utilizados en Masdenverge en esta actividad.