Durante el siglo XX la exploración de las calidades y recursos sonoros dio lugar a la aparición de nuevos instrumentos y artefactos que permitieron crear música experimental y funcional. En la década de los 80 surgieron los ordenadores Atari -muy conocidos por los aficionados a los videojuegos- que supusieron una transformación en la creación digital de sonidos. A diferencia de sus ancestros, estos ordenadores buscaron recrear digitalmente sonidos reales para componer paisajes sonoros. Reconocidos artistas de la electrónica han utilizado estos equipos en sus creaciones.