Instrumento de plata cedido por la parroquia de San Pedro de l’Escala que se utilizaba para realizar la bendición de la sal en todas las casas del pueblo. La ceremonia del Salpàs se hacía el lunes de Pascua, y el cura, seguido de los monaguillos, bendecía con agua y sal las entradas de todas las casas para alejar las enfermedades o los malos espíritus.