Los haces de trigo se apilaban en los campos de Castelló d’Empúries, una zona productiva muy importante de esta área y donde a día de hoy todavía se conrea este cereal.
En este ámbito se encuentran algunas variedades de trigo que, bien mezcladas, permitían obtener los diversos tipos de harina que se utilizaban en la fábrica.
Con estas harinas se pueden hacer pasteles, pizzas, galletas... El pan, alimento básico, aporta hidratos de carbono y proteínas, necesarios para que el cuerpo esté sano.
En esta planta de la fábrica se encuentra la zona de ensacado de la harina y también un entramado de tubos que permiten conducir los productos de una máquina a la otra en un continuo subir y bajar.