Cabeza de viejo sátiro relacionado con el cortejo de Dioniso. Este tipo de imagen surge en época helenística (especialmente en Pérgamo a partir del siglo III a. C.), pero la aristocracia romana la usó profusamente para decorar sus residencias, especialmente jardines y peristilos.
El hecho de que presente la parte posterior sin trabajar demuestra que debía de tratarse de un herma que se encastraba en otra pieza ―probablemente un busto o una pilastra—, o bien que se usaba como complemento decorativo de una fuente. Está datada en el siglo II d. C. y posiblemente procede de la zona de Tarragona.