Este cilindro metálico de hojalata solía contener la licencia absoluta, documento muy valioso concedido a los soldados para eximirlos definitivamente de las obligaciones militares. También conocido como canuto, se colgaba del cuello con cuerdas de colores.
La pieza se remonta a la época en la que el servicio militar era obligatorio para todos los varones de 20 años. Este portadocumentos en concreto es de principios del siglo XX. Cuando el soldado quedaba reclutado, perdía su estatus civil y pasaba a la jurisdicción militar hasta el momento de la licencia absoluta o «la blanca».