Los restos del castillo de Sant Esteve de Mar (o de la Fosca) se han consolidado en el marco del programa Románico Abierto de la Obra Social ”la Caixa”, con el objetivo de recuperar un espacio emblemático de la localidad de Palamós. El castillo está situado en un lugar privilegiado sobre la playa de La Fosca, al pie del camino de ronda, con vistas extraordinarias a la fachada litoral.
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\ Erigido sobre una villa romana, el castillo de Sant Esteve se menciona por primera vez en 1063. En 1277, Pedro II el Grande lo compró para fundar en el territorio un puerto real para sus barcos, acontecimiento histórico que se sitúa en el origen de la ciudad de Palamós. Perdida su notoriedad, conservó las funciones militares y de vigilancia durante las épocas medieval y moderna, como punto de control sobre la navegación y de defensa contra la piratería. Con el tiempo, se reconvirtió en masía dedicada a tareas agropecuarias, hasta su abandono definitivo a mediados del siglo XX.
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\ El Museo de la Pesca organiza visitas guiadas regulares al castillo de Sant Esteve para explicar el origen, la tipología, la arquitectura y las funciones del edificio, así como su papel en la convulsa historia de Palamós.