Además de la vajilla fina o porcelana que había en las casas pudientes, hasta mediados del siglo XX existió una importante actividad artesanal en el Pallars y en el Pirineo dedicada a la producción de alfarería doméstica de uso cotidiano: fuentes, tupins (ollas), soperas, tazas...
Salàs de Pallars, Gerri de la Sal y Rialp fueron los tres núcleos alfareros más importantes de la zona. En el ecomuseo se han recuperado y reproducido algunas de las piezas producidas antiguamente en estos centros.